1. Plano Fónico
Los recursos expresivos son muchos y
variados. Aconsejo —en caso de que nos encontremos ante un texto en verso—
comenzar por el análisis métrico.
Tras explicar el tipo de estrofa y versos utilizados, es conveniente
intentar justificar su uso en
función del tema tratado o de las posibles influencias recibidas por el autor.
Las figuras que afectan al plano fónico son, fundamentalmente, los
distintos tipos de reiteraciones
fónicas (aliteración, onomatopeya,
paronomasia...). Se atenderá especialmente a los efectos rítmicos que
producen y a la significativa distinción de las palabras que intervienen en
estos efectos.
1.1. Aliteración: repetición de un sonido o de varios iguales o próximos en un verso,
estrofa, período... etc. Tiene efectos eufónicos o cacofónicos.
con el ala aleve del leve
abanico [Rubén
Darío]
Infame turba de nocturnas aves [Luis de Góngora]
1.2. Onomatopeya: Consiste
en imitar sonidos reales mediante los procedimientos fonéticos de la lengua.
Puede hacerse por imitación léxica (siseo,
zigzag, tartajeo) o por aliteración: En
el silencio sólo se escuchaba / un susurro de abejas que sonaba [Garcilaso de la Vega].
1.3. Paronomasia: Semejanza
fonética de palabras o grupo de palabras. Al utilizar palabras de sonido muy
semejante, pero diferente, y con significado muy distinto se produce un
contraste de gran efectividad expresiva.
Vendado que me has vendido [Luis de Góngora]
2. Plano Morfosintáctico
Se refiere al uso de las palabras como categorías gramaticales
(sustantivo, adjetivo, verbo...) y a su combinación sintáctica. Las principales
cuestiones a tener en consideración son:
2.1. Estilo nominal
/ Estilo verbal: Es importante hacer notar en el
comentario si domina el estilo nominal o el estilo verbal; es decir, si
predominan los elementos constituyentes del sintagma nominal (nombres,
adjetivos, determinantes) o del sintagma verbal (verbos, adverbios), teniendo
en cuenta que en el uso normal de la lengua el uso los nombres es mayor que el
de los verbos.
2.1.1. Estilo nominal: Si destaca el uso del
nombre predomina el estatismo sobre el dinamismo, la frase suele ser más larga,
el ritmo más lento. Relacionado con el nivel semántico, hay que destacar si en
la significación de los nombres
sobresalen claramente los concretos (preeminencia de la objetividad) o, por el
contrario, existe una relativa abundancia de los abstractos (en este caso, el
texto es fundamentalmente conceptual, lógico; o bien, predomina la subjetividad
del hablante). Se tendrá también en cuenta el posible empleo de los afijos,
especialmente sufijos de carácter subjetivo (afectivos, despectivos...).
Especial interés presenta
el estudio del adjetivo. Es uno de
los elementos embellecedores de la lengua literaria más importante, por lo que
hay que prestarle el mayor interés: valora subjetivamente, clasifica,
transforma la realidad, destaca una cualidad sobre las demás... Interesará
básicamente el epíteto es decir, el adjetivo con valor explicativo. Según su
valor expresivo pueden ser propios o constantes, accidentales, metafóricos,
sugestivos, dinámicos, estáticos... Su anteposición al nombre subraya su
calidad significativa. Un caso especial es la sinestesia, que aporta una
cualidad que el nombre no admite objetivamente.
2.1.2. Estilo verbal: Si hay abundancia de
verbos, el texto es dinámico, narrativo.
Habrá que tener en cuenta los rasgos significativos privativos del verbo,
especialmente el modo y el aspecto. La abundancia de formas del subjuntivo
denota algún tipo de subjetividad que habrá que precisar, por oposición al modo
indicativo propio de la objetividad.
El aspecto perfecto es propio de la
narración, ordenando temporalmente las acciones, mientras que con el uso del imperfecto éstas se difuminan en el
tiempo sin ofrecer precisión cronológica, por lo que es más descriptivo que
narrativo.
2.2. Orden de los elementos de la oración. Predominio del orden lógico (claridad) frente al hipérbaton, que destaca subjetivamente algún elemento de la frase
al sacarlo de su posición habitual.
2.3. Tipo de oración. La oración simple revela
sencillez y claridad, mientras que el uso frecuente de la oración compleja,
especialmente de la subordinación, es indicativo de complejidad y elaboración
intelectual.
2.4. Figuras retóricas que afectan al plano morfosintáctico
2.4.1. Epíteto: Aunque no se trata propiamente de una figura literaria, estamos ante
un recurso expresivo de capital importancia. El epíteto es el adjetivo con valor explicativo, que destaca una
cualidad del nombre, por lo que sirve al escritor para matizar o subrayar
aquellos aspectos de la realidad descrita que quiere poner en el primer plano
de la atención del lector. Esto permite someter a dicha realidad a un proceso
de subjetivación por la selección de determinadas cualidades; así, podremos
hablar, por ejemplo, de idealización, realismo, sátira, caricatura..
Cerca del Tajo, en soledad amena,
/ de verdes sauces hay una espesura [Garcilaso]
érase un naricísimo infinito / frisón archinariz,
caratulera, /
sabañón garrafal, morado y frito [Francisco
de Quevedo]
2.4.2. Pleonasmo: redundancia en la que se añaden términos no necesarios para entender
la idea, pero que pueden tener valor expresivo.
de los sus ojos tan fuertemente llorando [Anónimo: Poema de Mio Cid]
2.4.3. Elipsis: supresión de elementos en la frase, sin que
se altere la comprensión, con lo que dota a ésta de energía, concentración y
poder sugestivo. Se sobreentiende el elemento elidido.
Y se nace ¿por qué? ¿por quién
que quiso? [Blas
de Otero]
2.4.4. Asíndeton: se
prescinde de las conjunciones para dar más rapidez, viveza y sensación de
agilidad a la frase.
fueros le da su osadía, / le
disculpa su riqueza, / su generosa nobleza,
/ su hermosura varonil [José de Espronceda]
2.4.5. Polisíndeton: repetición
de conjunciones que no son estrictamente necesarias; produce un tono solemne y
lento.
reman que reman que reman / ¡nunca de remar descansan! [Jorge Guillén]
2.4.6.
Anáfora: repetición de una palabra al comienzo de cada periodo (frase o verso).
Diana en corneta de fuego, / diana del pobre y del ciego, / diana de la madrugada. [Nicolás Guillén]
2.4.7.
Anadiplosis: repetición de una
palabra al final de un periodo y al comienzo del siguiente.
cuando morir es ir donde no hay nadie
/ nadie, nadie... [Blas
de Otero]
2.4.8. Epanadiplosis: repetición
de una palabra al comienzo y al final del mismo periodo.
Verde que te quiero verde [Federico García Lorca]
2.4.9.
Epífora: repetición de una
palabra al final de varios periodos.
A corazón suenan, resuenan, resuenan
[Rafael
Alberti]
2.4.10. Políptoton: repetición
de una misma palabra en varios de sus accidentes gramaticales; por ejemplo, de
un verbo en distintas formas de su conjugación.
soy un fue, y un será y un es cansado [Francisco de Quevedo]
2.4.11. Hipérbaton: alteración
del orden lógico o gramatical de la frase. Se utiliza para realzar alguna
palabra o concepto, como recurso intensificador de su contenido, así como para
embellecer o dar elegancia a la frase.
Por ti el silencio de la selva umbrosa; / por ti la soledad y apartamiento /
del solitario monte me agradaba.
[Garcilaso
de la Vega]
2.4.12. Paralelismo: repetición
de la misma estructura sintáctica en dos o más periodos; puede llevar implícita
la anáfora. Puede ser:
-
Sinonímico: repite aproximadamente el mismo contenido.
que los gritos de angustia del
hombre los ahogan con cuentos
que el llanto del hombre lo taponan con cuentos [León Felipe]
- Antitético: es decir, de contenidos
opuestos.
y la carne que tienta con sus
frescos racimos,
y la tumba que aguarda con sus fúnebres ramos.
[Rubén Darío]
- Sintético: desarrolla nuevos contenidos.
Por lo visto es posible
declararse hombre.
Por lo visto es posible decir
No. [Jaime Gil de Biedma]
3. Plano Léxico-Semántico
La frecuencia de
determinados tipos de palabras, su selección, la riqueza léxica... son
elementos importantes a considerar en el comentario de textos, así como las
características del léxico utilizado en razón de su origen literario, procedencia
lingüística y medio social: arcaísmos, cultismos, neologismos, barbarismos,
casticismos, vulgarismos...
Los valores contextuales, la connotación y los fenómenos semánticos
como la homonimia, la polisemia o la antonimia pueden tener particular
relevancia.
Especial estudio y detenimiento merecerán en nuestro comentario los tropos (metáfora, metonimia y
sinécdoque, imagen, símbolo y alegoría).
3.1. Paradoja: es la unión de dos ideas en apariencia irreconciliables; es decir,
una antítesis aparente, pues resulta no serlo debido al significado figurado de
uno o dos de los términos.
¡Oh llama de amor viva,
que tiernamente hieres [...]
¡Oh cauterio suave!
¡Oh regalada llaga! [San Juan de
la Cruz]
3.1.1. Oxímoron: oposición entre dos palabras juntas de
significado contrario.
La soledad sonora [San Juan de la Cruz]
3.1.2. Antítesis: contraposición de palabras o grupos sintácticos semánticamente
contrarios.
y la carne que tienta
con sus verdes racimos
y la tumba que aguarda con sus
fúnebres ramos [Rubén Darío]
3.2. Juegos de
palabras. Son muy diversos; entre
ellos encontramos:
3.2.1. Retruécano: alteración del orden de las palabras.
Piensa el sentimiento, siente el pensamiento. [Miguel de Unamuno]
3.2.2. Calambur: jugando con las sílabas de las palabras.
Yo no soy un intelectual,
todo lo más un telectual que está in. [Juan García Hortelano]
3.2.3. Dilogía o equívoco: es un tipo especial de polisemia, con carácter satírico.
el gran maestro aparecía [...] dotado de una metafísica original, dotado de
simpatías en el gran mundo, dotado de
una gran cabeza. [Luis Martín-Santos]
3.3. Eufemismo: no menciona directamente aquello a lo que se
refiere, sino que lo elude mediante otra palabra o rodeo de palabras.
definitivamente / duerme ya un
sueño tranquilo y verdadero (= la muerte) [A. Machado]
3.4. Interrogación
retórica: es aquella
interrogación que no pide respuesta, sino que sirve para acentuar la idea que
en ella se incluye.
¿No ha de haber un espíritu valiente? / ¿Siempre se ha de sentir lo que
se dice? / ¿Nunca se ha de decir lo que se siente? [Francisco de Quevedo]
3.5.
Apóstrofe: es la invocación exclamativa dirigida a un ser presente o ausente, real
o imaginario.
¡Oh dulces prendas, por mí mal halladas! [Garcilaso de la
Vega]
3.6. Perífrasis: no
expresa la idea directamente, sino mediante un rodeo que permite detenerse más
detalladamente en la descripción.
Aquel ave / que dulce muere y en las aguas mora. [Luis de
Góngora]
3.7. Ironía: con
ella se da a entender lo contrario de lo que literalmente se dice, generalmente
con fines de burla. Si se hace con intención cruel, hiriente, se le llama sarcasmo.
¿Dónde has aprendido a hablar
así a los niños? Continúa así y te
llamarán de usted...
[Juan
García Hortelano]
3.8. Hipérbole: se
origina al exagerar los términos, aumentar o disminuir desproporcionada-mente
objetos, acciones, cualidades...
el humor corrosivo de tus manos
feroces / que cortaban la leche y
oxidaban el oro / y marchitaban las
flores. [Gabriel García Márquez]
3.9. Personificación
o prosopopeya: consiste en otorgar cualidades de seres
animados a seres inanimados, o cualidades propiamente humanas a seres no
humanos.
Con mi llorar las piedras
enternecen / su natural dureza y la
quebrantan.
[Garcilaso]
3.10. Animalización: dotar
de cualidades propias de algún animal a seres humanos.
Ante el mostrador, los tres visitantes, reunidos como tres pájaros
en una rama, ilusionados y tristes... [Ramón
del Valle-Inclán]
3.11. Cosificación: aplicar
cualidades de cosa a persona.
Si eres campana, ¿dónde está
el badajo?; / si pirámide andante,
vete a Egipto [Quevedo]
3.12. Sinestesia: dotar de cualidades sensoriales a un sustantivo que objetivamente no
puede poseerlas, ya que éstas corresponden a un sentido con el que no puede ser
percibido el referente de dicho nombre.
Yo soy aquel que ayer no más decía / el verso azul y la canción profana.
[Rubén Darío]
Sobre la tierra amarga [Antonio
Machado]
3.13. Símil o comparación: compara
un término real con otro imaginario que posee alguna cualidad análoga. A
diferencia de la metáfora no identifica los términos, sino que mantiene el
término de la comparación (como, tal, tal
que, como si...).
era como el tiempo delicuescente, algo
como chocolate muy fino [Julio Cortázar]
3.14. Metáfora: como
en el símil, la base es una
comparación, pero a diferencia de éste, en la metáfora se establece una identidad entre los dos términos, el real [r] y el imaginario [i], basándose en una relación de semejanza. Se distinguen dos tipos:
3.14.1. Metáfora impura (cuando se expresan
los dos términos). Puede utilizar distintas fórmulas:
- «r es i»: El sol es un globo de fuego, / la luna es un disco morado [Antonio Machado]; álamos que seréis
mañana liras / del viento perfumado
en primavera [Antonio Machado].
- «r de i»: peinando sus cabellos de oro
fino [Garcilaso de la Vega]
- «i de r»: El jinete se acercaba / tocando el
tambor del llano [Federico García Lorca]
- «r, i» (metáfora
aposicional): las palabras, guantes grises [OctavioPaz]
- «r: i»: Sifón: agua con hipo [Ramón Gómez de la Serna]
3.14.2. Metáfora pura (cuando sólo se expresa el término imaginario).
Su luna de pergamino [pandero] / Preciosa tocando
viene. [Federico García Lorca]
3.15. Metonimia y Sinécdoque: al
igual que en la metáfora, se sustituye un término real por otro imaginario;
pero, en este caso, la relación se establece por causalidad, contigüidad o
sucesión de los términos (metonimia),
o por cantidad —la sustitución del todo por la parte, o viceversa— (sinécdoque). Hoy en día no suele
distinguirse entre una y otra, pues sus fronteras significativas no están
claras en muchos casos.
en el corredor se agrupan, bajo la luz de una candileja, pipas, chalinas y melenas del modernismo
(hace alusión a las personas que están en el corredor,
elige un objeto que las identifica) [Ramón
del Valle-Inclán]
3.16. Símbolo: en
esta figura el término real es un concepto abstracto, que es sustituido por un
elemento concreto, por lo que la relación entre ambos no puede ser, como en la
metáfora, de parecido, sino de origen psicológico o convencional.
Nuestras vidas son los ríos [Jorge
Manrique]
El roble es la guerra, el roble / dice el valor y
el coraje [Antonio Machado]
3.17. Imagen: en este término podemos incluir toda figura que, como el símil, la metáfora, la metonimia, la
sinécdoque o el símbolo, consista en la sustitución de un término real por otro
imaginario. Sin embargo, solemos reservarlo a aquella sustitución que no se ha
basado en una relación objetiva o correspondencia aceptada culturalmente, sino
en algún elemento irracional.
La aurora de Nueva York tiene / cuatro columnas de cieno / y un huracán
de negras palomas / que chapotea las aguas podridas. [Federico García Lorca]
3.18. Alegoría: es una
representación continuada de términos imaginarios (i1, i2,
i3, i4...) que corresponden a términos reales (r1,
r2, r3, r4...), formando un conjunto global
(R) de significación metafórica (I).
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