jueves, 12 de diciembre de 2013

Resumen esquemático del tema de las lenguas de España

Se plantea el tema con una perspectiva global de la situación del mapa lingüístico actual de España, haciendo hincapié en la convivencia de las distintas lenguas y dialectos —sin entrar en detalles de las características particulares. Por otra parte, se estudia la situación del español en el mundo: lugares en que se habla, proyección cultural del castellano, así como perspectivas para un futuro próximo.

I LAS LENGUAS Y DIALECTOS DE ESPAÑA


En la actualidad en España se hablan tres lenguas de origen indoeuropeo, derivadas del latín (castellano, catalán y gallego) y una lengua no indoeuropea (el vasco o eusquera). La Constitución española de 1978 en su Art. 3.º da el rango de cooficiales en sus Comunidades a catalán, gallego y vasco. El castellano es el idioma oficial de la nación. La población que vive en comunidades bilingües es aproximadamente de dieciséis millones de habitantes, el 40% del número total de habitantes de España.
Cada una de las lenguas españolas ofrece variedades dialectales distintas:
1.1. El castellano: presenta, a grandes rasgos, las siguientes áreas dialectales:
·       La franja norte: Se corresponde con las zonas bilingües. Recibe influencia del gallego, el vasco y el catalán además de alguna característica de los dialectos históricos leones y aragonés. Por ejemplo, en el espacio geográfico del dominio del catalán se ensordecen las consonante finales (verdat, Valladolit, Madrit...) o se diferencia la pronunciación de «v» y «b».
·       La franja central: se ajusta más fielmente al castellano normativo. No obstante presenta rasgos propios de las hablas locales de esa área peninsular: la pérdida de la  «-d» final (Madrí o Madriz).
·       La franja sur: está ocupada, en su mayor parte, por los dialectos meridionales: extremeño, murciano, andaluz, canario... y presenta rasgos como el seseo, yeísmo, confusión de la «-r» y de la «-l» final de sílaba y pérdida de la «-s» final.

1.2. El gallego: La lengua gallega es el resultado del latín vulgar en los territorios situados al norte y al sur del río Miño. La lengua romance recibió el nombre de gallego-portugués. De gran importancia cultural durante la Edad Media, a partir del siglo XV entra en un período de decadencia y queda reducido al uso familiar. En el siglo XIX se fomenta de nuevo el uso del gallego como lengua literaria: Rosalía de Castro. Durante el siglo XX en diferentes momentos se trata de recuperar el gallego para su uso tanto literario como público.
        Es difícil segmentar zonas dialectales precisas. Se suelen diferenciar tres grandes zonas: occidental, central y oriental. Cuenta con más de dos millones y medio de hablantes en Galicia y en la franja colindante de Asturias.León y Zamora.

1.3. El vasco o euskera: es una lengua aislada cuyos orígenes siguen siendo un enigma. Son numerosas las teorías que han pretendido explicar su procedencia. Actualmente existen dos hipótesis sobre las que no hay pruebas concluyentes: para unos, el eusquera estaría emparentado con las lenguas caucásicas y para otros con lenguas como el bereber, sudanés... (camíticas). Lo único cierto es que no es una lengua indoeuropea y que es una lengua hispánica que estaba asentada antes de la romanización en el golfo de Vizcaya. El área primitiva era de extensión mayor que la actual.
El idioma vasco ha sobrevivido como lengua hablada en el ámbito familiar y como literatura oral que ha llegado hasta nuestros días. Es importante la poesía oral de los bertsolaris, poetas que improvisan.
En el vasco se distinguen dos grandes grupos dialectales: el vizcaíno y el centro-oriental con numerosas variantes. El modelo normativo base en la comunicación, la enseñanza y la administración es el euskera batua. Cuenta con más de setecientos mil hablantes en el país Vasco y en zonas del departamento francés de los Pirineos.

1.4. El catalán: Es el resultado de la evolución del latín vulgar en los territorios del antiguo principado de Cataluña. Se extendió durante la Reconquista por las islas Baleares y la mayor parte de Valencia, también se conserva en la isla de Cerdeña. Posee una riquísima literatura en la Edad Media y a partir del siglo XIX. El mapa dialectal catalán presenta mayor cohesión que el de la mayoría de las lenguas románicas. Cuenta con dos grandes áreas dialectales:
·       El catalán oriental: rosellonés. Central, balear y el de la isla de Cerdeña.
·       El catalán occidental: noroccidental y valenciano.
La hablan más de seis millones de personas en Cataluña, en la Comunidad Balear, en gran parte de la Comunidad Valenciana, en Andorra. Es la primera lengua no estatal de Europa en número de habitantes.

II BILINGÜISMO Y DIGLOSIA

En diversas zonas del territorio español se produce en la actualidad una situación de bilingüismo, ya que se usan dos lenguas con idénticas funciones y en situaciones comunicativas también idénticas. Esto ocurre en las comunidades autónomas de Galicia, País Vasco, Navarra (zona norte) Cataluña, Valencia y Baleares. En todas ellas se da el uso de dos lenguas españolas. Esta situación se inicia en el siglo XVI cuando el castellano se generaliza y en varias zonas convive con otras lenguas.
Hay auténtica situación de bilingüismo cuando el uso de ambas lenguas se produce en condiciones de igualdad.
Con el término diglosia se nombra el desequilibrio en el uso en un territorio de dos lenguas distintas, un código lingüístico suele utilizarse para las manifestaciones culturales que se produzcan y el otro código queda relegado al ámbito familiar. Diversos son los factores que influyen en la existencia de una situación de bilingüismo o diglosia:

1.   Tratamiento de favor administrativo o político de alguna de las lenguas.
2.     Desequilibrio en el desarrollo cultural que se plasma en la creación y difusión de la literatura y en uso mayor o menor en los medios de comunicación de masas.
3.     Importancia de la emigración y adaptación de ésta a una situación bilingüe, si no existe esta adaptación puede producirse un desequilibrio significativo.
4.     Existencia de un modelo general de uso al que se ajusten los hablantes; si no existe una lengua puede derivar en múltiples variantes que dificulten su aprendizaje y su utilización.


III EL ESPAÑOL EN EL MUNDO

El número de personas que en el mundo tienen el español como primera lengua es superior a los 350 millones de hablantes. Se habla en diecinueve países de Hispanoamérica, En Guinea Ecuatorial, Filipinas y en diversas colonias de judíos sefardíes. Es la segunda lengua de Estados Unidos. Es la segunda lengua de comunicación internacional -después del inglés-
En todo el mundo existen más de 16.000 publicaciones periódicas en castellano. El Instituto Cervantes tiene como función difundir la lengua y cultura españolas por el mundo.
3.1. El español en Estados Unidos. Existen unos treinta millones de hispanohablantes, es el idioma con mayor demanda en las universidades, en la enseñanza secundaria el 62% de estudiantes cursan español como segunda lengua. Siete son los diarios en castellano, existen 37 canales de televisión y cerca de cien emisoras de radio. Las características del español en esa zona son similares a la de la modalidad mexicana, aunque varían según la procedencia de los hablantes. En las áreas de extensión generalizada del español se ha producido una simbiosis lingüística que ha dado lugar al espanglish, híbrido de español e inglés fonético, gramatical y léxico.
3.2. El judeoespañol, ladino o sefardí. Es el idioma hablado por los descendientes de los judíos expulsados de España por los Reyes Católicos en 1492. lo hablan actualmente un millón de personas en distintos países. Israel , con varios cientos de miles de hablantes, es el país donde más extendido y más activo está su uso . es una lengua sustancialmente familiar y representa una muestra fiel de lo que fue el español de fines del siglo XV.

3.3. El español de Hispanoamérica.
El español llevado a América es el del siglo XVI. En la colonización intervinieron tanto hombre cultos como de extracción social baja, por lo que no existe una única variedad diastrático (depende del nivel cultural, social). El español convive con lenguas amerindias anteriores al descubrimiento, por ejemplo el quechua cuenta con 13 millones de hablantes en Perú y Bolivia.
Zonas dialectales: Se distinguen tradicionalmente cinco zonas dialectales basados en la mayor o menor fuerza de los sustratos precolombinos, zona quechua, zona araucana... otras clasificaciones se apoyan sólo en rasgos lingüísticos.
Algunos rasgos lingüísticos:
·       Fónicos: Seseo, Yeísmo, pérdida de «-s» final de palabra, aspiración de «h-» inicial, procedente de «f» inicial latina .
·       Morfosintácticos: distinto género en algún sustantivo, mayor uso del diminutivo que afecta a adjetivos y adverbios: apañadita, lucidito, ahorita, cerquita, lejitos...ausencia de laísmo, leísmo y loísmo... El voseo : ausencia total de la forma pronominal vosotros, la forma ustedes sustituye ésta, tanto para el tratamiento cortés como para el familiar. La forma vos que sustituye en algunas zonas al “tú” y en otras convive con ella (vos te quedás, vos tenés prisa...). Pérdida de algunas formas verbales, mayor uso de perífrasis verbales.
·       Léxicos: son los que reflejan mayores diferencias con el castellano peninsular: presenta tres componentes básicos en su formación:
o   el léxico patrimonial castellano,
o   léxico procedente de las distintas lenguas amerindias y
o   léxico africano.
En términos generales, en el léxico se produce una oscilación entre los arcaísmos y los neologismos. Numerosos términos que han dejado de usarse en el español peninsular siguen usándose con su significado primitivo o con un nuevo significado (esmorecer —desfallecer, morir—; arbeja —guisante—).
Existe gran facilidad para la incorporación de términos nuevos, especialmente préstamos o calcos: elevador, cartón (dibujo animado). Estos préstamos son de diversas procedencias: italiano, portugués, francés...y , por supuesto, del inglés —en forma de avalancha.

Interesantísimo artículo sobre el concepto de gratuidad en nuestra sociedad

   Descárgatelo gratis
       Hay aplicaciones y servicios digitales que no piden dinero, pero sí valiosos datos
Álex Grijelmo
14 de marzo de 2013

       "Gratis” es una de esas palabras que usamos y escribimos igual que los romanos de hace más de 2.000 años. Podemos, pues, maravillarnos ante ella como lo haríamos si nos mostraran unos hallazgos arqueológicos bajo el teatro de Mérida.
El Diccionario de la Real Academia define “gratis” sin mucha dedicación:
    “Gratuito (de balde). Gratuitamente (de gracia)”.
Prácticamente como la definición de 1780, edición en la cual se decía en esa misma entrada:
    “Lo mismo que de gracia, o de balde”.
Y si uno busca “gratuito”, encuentra:
    “De balde o de gracia”.
Y en “de balde” hallará:
    “Gratuitamente, sin coste alguno”.
Y en “de gracia” leeremos esta definición:
    “Gratuitamente, sin premio ni interés alguno”.
Nos ayuda a salvar ese círculo el Diccionario del español actual, dirigido por el académico Manuel Seco.
    “Gratis: sin pago o compensación a cambio”.
Resumimos nosotros, pues: ni hay pago ni hay compensación: se recibe algo sin coste ni interés alguno. Quizá pudiéramos afinar más: “A cambio de nada”.
La tecnología suele buscar contrapartidas. En este mundo casi nadie regala nada
La publicidad de las insistentes aplicaciones del smartphone o teléfono listo (quizá deberíamos reservar eso de “inteligente” para algo que fuera capaz de razonar) nos insiste en que descarguemos gratis tal o cual aplicación.
Ya empezamos asumiendo que semejante tarea es una “descarga”, aunque no cambiemos nada de sitio ni parezca de gran esfuerzo el empeño, ni nos dé calambre alguno, ni aliviemos a nadie de un peso ni saquemos los bultos de un camión de mudanzas. Aquí el elemento descargado no desaparece de un lugar para trasladarse a otro, sino que continúa donde estaba a pesar de que obtengamos de él una réplica o un servicio. Pero es una descarga, vale. Aceptamos descargar como equivalente de obtener o conseguir, o replicar o instalar, o copiar; y hasta aceptamos bajar como acción de mover algo que no estaba arriba, ni a ninguna altura conocida, que sepamos, y que además se queda en el mismo lugar para que lo descarguemos una y otra vez sin moverlo siquiera.
Todo eso lo aceptará la Academia y lo tenemos en el uso cotidiano.
Pero la palabra “gratis” está en otro costal. Su viejo sentido en latín y en español se mantiene vivo. Y ahora se aplica a una realidad distinta, quién sabe si con la misión de engañarnos. Nos esconden el significado tan agradable, tan grato (obtener algo “a cambio de nada”, por generosidad, por placer, gratis et amore) y nos dan otro parecido pero no igual (obtenerlo “a cambio de algo de lo que no nos damos cuenta”).
En efecto, al bajarnos o descargarnos determinadas aplicaciones o servicios no pagamos nada en el acto (al me-
nos así sucede con una parte de lo que se nos ofrece en ese escaparate que llevamos en el bolsillo); pero eso no supone que nos salga gratis.
Igual que censuraríamos por pleonásticas las expresiones “gratis total” o “totalmente gratis”, entendemos que lo gratuito no tiene grados: o una cosa es gratis del todo, o no es gratis. Solo con que costara un céntimo ya no sería algo gratuito.
Si un vecino le da de comer a un mendigo a cambio de que le pinte la puerta, no le está pidiendo dinero; pero tampoco le alimenta gratis.
Y si recibir algo gratis significó siempre que nos lo regalan, que no damos nada a cambio, no sucede eso en nuestros teléfonos listillos. Los trámites para descargar o bajar el servicio o para suscribirnos obligan a responder ante distintos requerimientos, que varían en cada caso: número de tarjeta, correo electrónico, datos personales...
Lo mismo sucede en algunos restaurantes, en ciertas tiendas donde resolvemos olvidos imperdonables o en comercios que nos ofrecen hacernos socios “gratuitamente” de un club de clientes. Pero si uno emprende el proceso para tal suscripción, se encontrará enseguida con un formulario donde se le reclaman algunos datos innecesarios para el fin propuesto. Por ejemplo, una red de gasolineras solicita, al ofrecer “gratis” su tarjeta de socio, datos como “ingresos anuales brutos del solicitante” o “ingresos anuales brutos del cónyuge”, además de otros que conciernen solo a la intimidad del vehículo.
No nos piden dinero, pero nos dan algo... a cambio de algo. No es a cambio de nada.
Quien nos reclama tales detalles personales —especial-mente las empresas de tecnología y comunicación digital— podrá usarlos en su propio beneficio. Los cruzará tal vez con lo que ya sabe de nosotros: dónde vivimos, por dónde nos movemos, qué recorridos y destinos buscamos en “cómo llegar”, cuánto dinero manejamos, qué pronóstico meteorológico nos interesa... Y obtendrá de ello una rentabilidad para segmentarnos en los estudios de mercado y ante los anunciantes, quienes nos asediarán luego con publicidad personalizada; o quién sabe si los empleará para juzgarnos aptos o rechazarnos cuando se dé la ocasión de que pidamos algo al poseedor de nuestros datos.
Así pues, la descarga, la serie de descargas o el uso de servicios aparentemente gratuitos no nos salen gratis, sino que damos mucho a cambio. Damos información sobre nosotros mismos, muy valiosa para el que la obtiene.
A unos les importará más y a otros menos. Dependerá de sensibilidades, o de prejuicios, o de prudencias, tal vez de ideologías, quizá de haber leído o no a Orwell. Pero la tecnología suele buscar contrapartidas. En ese mundo casi nadie regala nada; aunque diga que lo ofrece gratis.
El problema ahora es si nos podremos bajar de ahí.

Semántica de una expresión


Para que veáis la cantidad de cosas que pueden decir con la misma palabra:
 
¡Hombre! ¡Mujer!

1. Afirmar, asentir, dar permiso, dar la razón, expresar acuerdo: Claro, hombrepues, claro, hombresí, hombre (sí)(sí) hombre, claro que que sí, hombre (que sí)hombre, por supuesto
2. Negar, oponerse, contradecir, expresar reserva o reticencia, denegar permiso, rechazar algo: (No) hombre, (no)que no, hombre (que no)hombre, por Dios
3. Animar, insistir, tranquilizar: Venga, hombrevamos, hombreanda, hombre
4. Explicar, exponer razones: Pues, hombre
5. Ganar tiempo para pensar: Hombre, pues
6. Expresar sorpresa, decepción, desilusión, desagrado o molestia, lamentarse de algo: Vaya, hombre
7. Expresar incredulidad: Venga, hombreanda, hombre
8. Manifestar desacuerdo: Vamos, hombre
9. Responder a una disculpa: Nada, hombre
10. Expresar desprecio: Toma, hombre
11. Expresar desacuerdo parcial, reticencia: Pero, hombrehombre, perohombre, es que
12. Regañar, llamar la atención de alguien: Pero, hombrepero hombre por Dios

martes, 10 de diciembre de 2013

PROXÉMICA Y PARALENGUAJE


Introducción


El espacio y la voz, son otros dos aspectos de la comunicación efectiva. El primero tiene significado cultural, y puede expresar jerarquía o relación, y el segundo influye en la atención de quien recibe el mensaje, al igual que va a reflejar seguridad y credibilidad, sí es bien empleado.

Proxémica.

Es el estudio de la forma en que las personas utilizan el espacio (personal y/ o social) para comunicarse. Espacio comprende desde el aspecto físico del lugar o la distancia para hablar. La última, llamada conversacional, varía de acuerdo con aspectos personales y situacionales ( el lugar). Algunos aspectos personales son: sexo, agrado, edad; e internas como el nerviosismo.
Existen cuatro tipos de distancias:
  • Distancia cercana o íntima: Es en un espacio menor a un metro (desde 15 cm. a 50 cm.), indica familiaridad.
  • Distancia personal: Es en un espacio de 50 cm. a 75 cm., es la más cómoda y usual, se considera amistosa.
  • Distancia social: Es de uno a dos metros y medio, se utiliza para primeros acercamientos.
  • Distancia pública: Va más allá de los dos metros y medio, y se considera impersonal, se utiliza para discursos o conferencias.

El significado de un espacio definido es cultural. Por lo tanto tiene significado connotativo, dentro de ciertos contextos.

Paralenguaje.

Es el conjunto de características de las cualidades de la voz, tales como el tono, la dicción, la entonación, la fluidez y el ritmo al habla, además de que la risa, el llanto, el bostezo, las pausas, el suspiro y las muletillas, influyen en esta. El nerviosismo puede provocar un cambio en las cualidades de la voz.
Existen factores o elementos que intervienen en el significado de una frase, estos pueden ser:
  • Dicción: saber articular y pronunciar las palabras.
  • Tono: es el volumen alto o bajo.

  • Fluidez: es la facilidad de expresión.
  • Ritmo: son combinaciones de acentos, ritmos y pausas, y la velocidad con que ocurren estas. Un buen ritmo es de 2 palabras por segundo, o 120 palabras por minuto.
  • Entonación: Es la variación y flexiones de la voz, dan énfasis a la expresión y por lo tanto emotividad.

La voz es nuestra mejor arma en la comunicación oral, y para que cumpla su objetivo es necesario tener en cuenta todos los puntos anteriores y prestar atención a la importancia de cada uno.


Bibliografía.
Proxémica y Paralenguaje. Teoría Complementaria Media Center L.S Comunicación Verbal. Grupo 01

viernes, 6 de diciembre de 2013

Otro artículo relacionado con la educación en nuestro país (para que lo comentéis)

La séptima

Rosa Montero. El País

Haber tenido siete leyes para la enseñanza en 35 años es un disparate que raya con el suicidio educativo

Se mire como se mire, creo que haber tenido siete leyes para la enseñanza en 35 años es un disparate que raya con el suicidio educativo. Supongo que no hay españoles menores de 40 años que hayan podido cursar todos sus estudios dentro de un solo plan, una situación delirante que debe de influir en el bochornoso nivel de educación de nuestro país. Ya saben que, según la Evaluación de la Competencia de los Adultos llevada a cabo por la OCDE entre 23 países, España saca la peor nota de todos en matemáticas, y la segunda peor en comprensión lectora. Son unos datos catastróficos y me temo que la responsabilidad es colectiva, porque en ese diluvio de leyes para la enseñanza veo un ejemplo del sectarismo, de la incapacidad de nuestros políticos para trascender sus míseras batallas de poder y llegar a acuerdos nacionales en pro del bien común.
Total, que aquí tenemos la LOMCE de Wert, la séptima ley de la democracia, a la que la oposición ha prometido derogar en cuanto pueda (¡a por la octava!) y que no pinta nada bien: parece reforzar los centros concertados y debilitar a los públicos, además de dificultar que padres y profesores elijan a los directores. A lo peor el instituto Beatriz Galindo de Madrid, en donde yo estudié durante siete años, es un ejemplo de lo que puede pasar con la ley Wert si no lo impedimos. En julio de 2012, el PP les impuso un director a dedo, Carlos Romero, que desde entonces ha creado un conflicto monumental con los padres, los alumnos y todos los profesores. Romero fue denunciado por el PSOE en la Asamblea de Madrid por su “despotismo”, por no consensuar nada; por “arbitrariedades” como gastarse el dinero en barnizar los bancos de la capilla mientras la biblioteca permanecía cerrada. En suma: profesores, padres y alumnos debilitados, directores politizados que hacen y deshacen al servicio de su partido. No parece un buen plan para desasnarnos.

martes, 3 de diciembre de 2013

Una columna de EL MUNDO (comentario de texto de)

Ofender a España

     Si digo en voz alta «España», así sin más, sólo quiero decir tres o cuatro paisajes, unas cuantas ciudades, siete u ocho poetas, un convoy de canciones, cierta luz de Levante, un puñado de amigos, varios seres que amo y algún viernes que sabe a ron disuelto en abrazos donde está La Cibeles. Apenas esto. «Mi país eres tú», aullaba Cernuda. No se puede ir más lejos. Menos para el Gobierno, que ha pegado una salva siniestra con la Ley de Seguridad Ciudadana y pretende hacer de España un arca sagrada que yo no entiendo. Dicen que ofender el palabro podrá ser multado con 30.000 euros. Una pancarta basta. Un grito quizá, aunque traiga razón pero venga a destiempo. ¿Qué coño es esto?
     Si yo sé algo de la España de ahora es lo que veo en la calle. Una sociedad altamente ofendida, molturada, traicionada por tipos que hacen las leyes con puntas de sílex y rinden culto al bozal como los simios al monolito de Kubrick. Un Estado asentado en la ofensa es un terruño fallido, una agrupación campamental de castas y tribus. Y en eso estamos. Tengo a mi alrededor gente honesta asqueada con este presente, con este país. No van a callarse --y yo voy con ellos--. Desprecian las coacciones lunáticas de una banda de maulas, blindada en lo político, que está jugando al gua con la peña. Son los mismos que empiezan multando pancartas y terminan chapando periódicos. Hay portadas que pesan más que un grafiti de «puta España». Aquí hemos dado algunas, acreditadas, que han hecho flipar a lo lejos a la misma Mafia. ¿Eso no les ofende?
     Al Gobierno le faltaba esto para mancharse aún más el apellido. Se han inventado una forma de entender el país a la manera de las barricadas. Ellos son los buenos. Nosotros, delincuentes preventivos. Los de las manifas. Los de las protestas. Los violentos. Los indocumentados. El ministro Fernández ha puesto al censo entero bajo sospecha, un capricho muy de policía. Y ha logrado con su ley que España sea eso que sucede al margen de nosotros, como si estorbáramos.
     Lo próximo será que nos detengamos en casa, en familia, cuando alguno vea a otro en disposición de ofender a la patria, esa droga tan brusca. A este paso, también prohibirán la gripe y al primero que tosa le caerán dos hostias. Con su permiso y el de Jabois voy a delinquir suavecito: vaya mierda de país. Buenos días.

viernes, 29 de noviembre de 2013

Análisis sintáctico de las siguientes oraciones


Estas son las oraciones que han caído en los últimos años en la PAU. Id haciéndolas tranquilamente —sin pausa y sin prisa— para practicar un poco:

1. ¿Hay que vivir solo para ser libre?
2. Cuando se le desataba la lengua por la alegría de las plumas ensopadas, decía frases de otros tiempos que no había podido aprender en la casa
3. Cuando tras dar mil vueltas a mis preocupaciones, me acuerdo de un amigo, voy a verle
4. Y al oír sus gritos, los que entretenían la espera a alguna distancia echaron a correr desalados hacia los postes más próximos
5. Mire usted si el papel trae los nombres de las gachís, Don Latí
6. La expansión del Imperio Romano fue un inmenso proceso de mestizaje de culturas y lenguas distintas, del que surgió la rica y contrastada cultura occidental
7. En corros silenciosos, otros prisioneros se repartían por los rumbos del calabozo, buscando los triángulos sin sol.
8. El teatro puede desplegarse en colosales artificios técnicos, en la maquinaria de una comedia musical de Broadway en la que hay helicópteros y gente que vuela y templos que se hunden.
9. El estruendo del arma lo despertaba, pero siempre era un sueño y en otro sueño el ataque se repetía y en otro sueño tenía que volver a matarlos.
10. Don Catalino estima que el juego del ajedrez es el más noble de los juegos, porque desarrolla altas funciones intelectuales
11. Cuando lean ustedes las cotizaciones de Bolsa tengan mucho cuidado y sepan diferenciar lo que reflejan
12. Al quejarse don Pedro del cuidado que le proporcionaba el manejo de la casa, sus hijos le dijeron que lo dejara en manos de Margarita.
13. La falta del nombre único ha hecho más difícil la comprensión del hecho y ha aumentado la dificultad de entenderlo cabalmente
14. Vuelvo a la vida con la muerte al hombro, abominando cuanto he escrito
15. ¿Cuál fue la réplica que pintó Velázquez? A mí el retrato que más me gusta es el de Boston.
16. La expansión del Imperio Romano fue un inmenso proceso de mestizaje de culturas y lenguas distintas, del que surgió la rica y contrastada cultura occidental
17. Especialmente efectivos para estimular la criminalidad son los mensajes que refuerzan los estereotipos negativos
18. Yo quiero que se enraícen en la greda amarilla de mis huesos menguados. ¡Por la parda escalera de las raíces vivas yo subiré a mirarte en los lirios morados!
19. Un simio es totalmente incapaz de construir instrumentos valiéndose de otros instrumentos, es incapaz de acceder a otra actividad instrumental.
20. En medio de este Olimpo cosmético y envasado me afeito contemplando mi rostro en un espejo muy amigo que se porta muy bien conmigo
21. Un segundo grupo de palabras que por su origen se escriben con b es el de aquellas que en latín tenían p intervocálica
22. Allá en las tierras altas por donde traza el Duero su curva de ballesta en torno a Soria, entre plomizos cerros y manchas de raídos encinares, mi corazón está vagando en sueños
23. En el acuerdo se asegura también que se mantendrán determinados servicios gratuitos, aunque serán de carácter promocional
24. Puede afirmarse que una de las aportaciones principales de la lingüística actual es haber puesto de manifiesto que no existen lenguas primitivas
25. Había estado en la muerte, en efecto, pero había regresado porque no pudo soportar la soledad
26. Porque en noches como ésta la tuve entre mis brazos, mi alma no se contenta con haberla perdido
27. La niña se desmayó en el sofá malva de la sala rosa. Ella creyó que usted se había muerto. ¿Por qué salió usted a pasear bajo la lluvia?
28. Es evidente que la capacidad económica proporciona unos medios para la actividad deportiva pero no ofrece garantías totales de éxito
29. El lenguaje no es una función natural y biológica del hombre sino una creación cultural que heredamos y aprendemos los hombres
30. No digas tonterías, Elvira. Sabes que mi marido está feliz de que vengas con nosotros.
31. Puede parecer imposible que en cada esquina de la actualidad se encuentre un centinela videoaficionado, pero es así.
32. Se inclina para besarla y da un golpe con el pie a la lechera, que se derrama estrepitosamente
33. Los que cocinamos los medios sabemos que estos personajes son monstruos atípicos, pero los telespectadores creen en ellos cada vez más
34. Había aprendido a no hacerse preguntas, a aceptar que la derrota se cuela en lo hondo
35. No olvidemos la concepción homogeneizante que se intentó establecer en la construcción del Estado-nación en América Latina
36. El padre de Ena, que había venido a Barcelona por unos días, a la mañana siguiente me vendría a recoger para que le acompañara en su viaje.
37. Los hábitos o necesidades de los individuos no determinan en qué dirección se producirán las mutaciones
38. Ahora se enterará de que las telas no sólo sirven para hacer flores, sino para empapar lágrimas
39. Esa sociología del exilio debería considerar los problemas que la diáspora ha generado y genera en el ámbito familiar
40. Ayer mismo éramos tú y yo dos críos que veníamos a fumar aquí, a escondidas, los primeros pitillos
41. Una idea entera se cambia porque una palabra se cambió de sitio, o porque otra se sentó como una reinita adentro de una frase que no la esperaba

miércoles, 27 de noviembre de 2013

RAE y sexismo

Menos sexismo en el nuevo Diccionario

La Real Academia Española suprime acepciones contestadas por su machismo en 2014

Algunas definiciones son inexactas pese a haber sido incorporadas en el siglo XX


                       fernando vicente

Borges se burló del Diccionario de la Real Academia Española (DRAE) con su característica inclemencia: “Cada nueva edición hace añorar a la anterior”. No parece que vaya a ocurrir con la versión vigésimo tercera, que saldrá a finales de 2014. Al menos desde el punto de vista del sexismo. Algunas de las acepciones más denostadas por su sesgo machista desaparecerán. Ya no será más huérfano quien pierda al padre que a la madre. Lo femenino no equivaldrá a débil y endeble, ni lo masculino a varonil y enérgico. Tampoco babosear tendrá entre sus variadas definiciones la de “obsequiar a una mujer con exceso” (aunque esta se enmendó durante una de las cinco actualizaciones realizadas desde 2001, cuando se publicó la 22ª edición del DRAE).
En las casi 93.000 entradas que recogerá la nueva obra (5.000 más que la actual) se incorporarán enmiendas en los nombres de profesiones o actividades que desempeñan mujeres. Entre otras, tendrán lema doble: alfarero, -ra, camillera, -ra, cerrajera, -ra, enterrador, -ra, herrero, -ra, picapedrero, -ra, costalero, -ra o soldador, -ra. Otras pasan a ser un nombre común en género, esto es, un término con masculino y femenino según el contexto, que sirve para unas y otros sin necesidad de alterar la terminación (el/la concertino, el/la submarinista o el/la guardabosque).

Gozos y sombras del DRAE

Algunas de las siguientes acepciones del Diccionario de la Real Academia Española serán modificadas en la edición, que se publicará a finales de 2014.
Huérfano. Dicho de una persona de menor edad: a quien se le han muerto el padre y la madre o uno de los dos, especialmente el padre.
Gozar. Conocer carnalmente a una mujer.
Cocinilla. Hombre que se entromete en cosas, especialmente domésticas, que no son de su incumbencia.
Periquear. Dicho de una mujer: disfrutar de excesiva libertad.
Cancillera. Cuneta o canal de desagüe en las lindes de las tierras labrantías.
Edén. Paraíso terrenal, morada del primer hombre antes de su desobediencia.
Hombre. Ser animado racional, varón o mujer. / Individuo que tiene las cualidades consideradas varoniles por excelencia, como el valor y la firmeza.
Mujer. Persona del sexo femenino. / Que tiene las cualidades consideradas
femeninas por excelencia.
Femenino. Débil, endeble.
Masculino. Varonil, enérgico.
Padre. Varón o macho que ha engendrado. / Cabeza de una descendencia, familia o pueblo. / Padre de familia: jefe de una familia aunque no tenga hijos.
Madre. Hembra que ha parido. / Madre de familia: mujer casada o viuda, cabeza de su casa.
“La edición de 2014 tendrá miles de novedades, algunas tan minúsculas que los lectores no las van a captar”, precisa su director, el académico y catedrático de Lengua española, Pedro Álvarez de Miranda. “Se trata de que el Diccionario sea mejor, no menos machista, sino de que lo que diga sea verdad. Parece que solo actuamos a instancias de parte y no es así… no se cambia por protestas sino porque no es verdad. Lo que no se puede pretender es cambiar la realidad a través del Diccionario. Si la sociedad es machista, el Diccionario la reflejará. Cuando cambia la sociedad, cambia el Diccionario”, añade.
Eulàlia Lledó, una catedrática de Lengua y Literatura de secundaria que lleva años investigando los sesgos sexistas en el lenguaje, solo comparte con el académico un aspecto: el retrato de la realidad. En su opinión, la casa es refractaria a incorporar usos igualitarios que están en la calle. “El DRAE está a años luz de la sociedad. Arrastra una inercia que parece que les gusta. Una de las misiones del Diccionario es reflejar la realidad. Si lees las definiciones de madre, padre o huérfano verás que no la reflejan. El androcentrismo y el sexismo son tópicos que contravienen la realidad”.
Convengamos que les cuesta. Retrocedamos hasta 1992, un año en el que ocurrieron tantas cosas en la sociedad española que no había tiempo para palabras. Para sumarse a la fiesta la RAE publicó la vigésimo primera edición del Diccionario, la segunda que se corregía en democracia y solo ocho años después de la anterior, sin enmendar ninguna de las definiciones que la realidad estaba sobrepasando a toda prisa, como periquear (“disfrutar de excesiva libertad la mujer”) o gozar (“conocer carnalmente a una mujer”), que había figurado en la versión de 1780 (“gozar de una muger: tener congreso carnal con ella, consintiendo ella o padeciendo violencia”) y luego desaparecido. Y aunque en su haber figuraron entradas como jueza, concejala o machismo, siguió resistiéndose a incluir médica. Un término con una extraña evolución: se registra en el canon lexicográfico de 1925 (“mujer que se halla legalmente autorizada para profesar y ejercer la medicina”) y se destierra de ediciones posteriores hasta 2001.
Álvarez de Miranda: "Se trata de que el DRAE sea mejor, no menos machista"
En algunos aspectos, el DRAE retrocedió en el XX. En el siglo que se consagran los derechos de la mujer como un pilar básico de las sociedades modernas —claro que en España se obstaculizó la igualdad (y no solo) durante cuatro décadas—, el Diccionario incorpora acepciones que proclaman el sometimiento de las mujeres como la citada babosear o las ningunean como ocurre con huérfano. Hasta la versión de 1925, la definición es impecable y mantiene con mínimos matices la introducida en el siglo XVIII por los primeros redactores: “La persona que ya no tiene padre, o madre, o le falta uno y otro”. Es en el siglo XX cuando se añade la coletilla que convierte a alguien en más huérfano si pierde al padre que a la madre.
Eulàlia Lledó: "El androcentrismo es un tópico que no refleja la realidad"
A la RAE, que ahora desterrará estas definiciones de su principal obra, le ha costado dar el paso, a pesar de que ya en la década de los ochenta encargó a tres expertas (entre ellas Eulàlia Lledó) un informe para detectar sesgos sexistas con vistas a mejorar la edición de 2001. “Del trabajo que hicimos, apenas recogieron cosas. Creo que cuando vieron la envergadura, decidieron cambiar poco. Pagaron por un trabajo que tiraron”, recuerda la filóloga. En el estudio no se limitaban a revisar definiciones, también analizaban ejemplos, donde detectaron una clara hegemonía de los masculinos y una sobreabundancia de casos peyorativos en los femeninos. “Les cuesta menos introducir cambios que tienen que ver con las profesiones que con aspectos relativos a lo físico, lo moral o lo sexual”, concluye Lledó. De las difíciles relaciones entre la Academia y las feministas da fe el debate generado el año pasado tras un informe del académico Ignacio Bosque sobre las guías de lenguaje no sexista en el que afirmaba: “Nadie niega que la lengua refleje, especialmente en su léxico, distinciones de naturaleza social, pero es muy discutible que la evolución de su estructura morfológica y sintáctica dependa de la decisión consciente de los hablantes o que se pueda controlar con normas de política lingüística”.
Médica figuró en femenino en la versión de 1925 y se suprimió después
El sexismo del lenguaje comenzó a combatirse a nivel internacional en la primera Conferencia Mundial sobre la Mujer, celebrada en México en 1975. No es exclusivo de las lenguas latinas. El inglés arrastra sus prejuicios. En un artículo de hace unos años, Deborah Cameron, profesora de Lengua y Comunicación en la Universidad de Oxford, citaba fireman (bombero), gestada a partir de la palabra man (hombre), y sustituida por el integrador firefighter tras presiones de movimientos femenistas. Dicho lo cual avisaba de que la lengua corre libre: “Las instituciones pueden legislar sobre el lenguaje, pero las reformas solo funcionan si la mayoría de los hablantes las aceptan. La gente nunca consulta a las autoridades antes de abrir la boca”. A estas alturas nadie comparte lo que un día espetó Leopoldo Alas: “Somos los amos de la lengua”. Las palabras nacen, mueren o se transforman por voluntad de todos en general y de nadie en particular (salvo excepciones: mileurista tiene una madre reconocida que acuñó el término en una carta a este diario que corrió como la pólvora). En esto coinciden los hacedores de diccionarios y quienes los someten a auditorías externas. “Las lenguas dependen de la gente y las cosas van a su cauce”, concede Eulàlia Lledó.
“El Diccionario tiene que reflejar la realidad y toma nota de lo que pasa del uso al desuso. Pero el Diccionario no puede acelerar el proceso”, defiende Álvarez de Miranda. Por ejemplo, sexo débil “podría estar cerca de la necesidad de tener una marca de vigencia porque probablemente hoy se usa poco, pero en la próxima versión saldrá sin marca”. En 2014 se conservarán las acepciones de sexo débil como “conjunto de las mujeres” y sexo fuerte o feo como “conjunto de los hombres”. Otra herencia sexista del siglo XX.


Gozos y sombras del DRAE

Algunas de las siguientes acepciones del Diccionario de la Real Academia Española serán modificadas en la edición, que se publicará a finales de 2014.
Huérfano. Dicho de una persona de menor edad: a quien se le han muerto el padre y la madre o uno de los dos, especialmente el padre.
Gozar. Conocer carnalmente a una mujer.
Cocinilla. Hombre que se entromete en cosas, especialmente domésticas, que no son de su incumbencia.
Periquear. Dicho de una mujer: disfrutar de excesiva libertad.
Cancillera. Cuneta o canal de desagüe en las lindes de las tierras labrantías.
Edén. Paraíso terrenal, morada del primer hombre antes de su desobediencia.
Hombre. Ser animado racional, varón o mujer. / Individuo que tiene las cualidades consideradas varoniles por excelencia, como el valor y la firmeza.
Mujer. Persona del sexo femenino. / Que tiene las cualidades consideradas
femeninas por excelencia.
Femenino. Débil, endeble.
Masculino. Varonil, enérgico.
Padre. Varón o macho que ha engendrado. / Cabeza de una descendencia, familia o pueblo. / Padre de familia: jefe de una familia aunque no tenga hijos.
Madre. Hembra que ha parido. / Madre de familia: mujer casada o viuda, cabeza de su casa.